Luz Estella Romero, la defensora de derechos humanos del año en Colombia
Por el trabajo que ha permitido sacar adelante casos de violación de DD.HH., crímenes de lesa humanidad e infracciones del Derecho Internacional Humanitario.
La abogada Luz Estella Romero fue elegida este miércoles como la defensora del año en Colombia por el trabajo que ha permitido sacar adelante casos de violación de DD.HH., crímenes de lesa humanidad e infracciones del Derecho Internacional Humanitario con impacto diferenciado en mujeres y niñas.
"La defensa de los derechos trasciende las fronteras de Colombia, este premio lo recibo en nombre de los que no están", dijo Romero, desde el País Vasco, en donde se exilió desde hace varios años debido a las amenazas por su trabajo.
Este galardón hace parte de la undécima edición del Premio Nacional de Derechos Humanos en Colombia, otorgado por la ONG de cooperación internacional Diakonia y el programa Act Iglesia Sueca con el apoyo de la embajada de ese país en Bogotá.
La ceremonia de entrega del Premio se realizó en el Auditorio del Centro de Memoria Paz y Reconciliación, en Bogotá, a la que Romero asistió de forma virtual.
En medio del llanto Romero agregó: "Hoy celebro con entusiasmo. ¿Qué sería de la revolución si no podemos bailar?. Asumo también ese maravilloso lema que se ha gestado en Colombia, es el periodo de la sabrosura".
La ganadora ha centrado su trabajo en defender los derechos humanos de comunidades empobrecidas de la región del Caribe colombiano. El haberse criado en el departamento Magdalena, uno de los más golpeados por la violencia paramilitar, la condujo por el camino del activismo social y la protección de las víctimas del conflicto armado.
En ese camino fundó la Asociación Colectivo Mujeres al Derecho (Asocolemad) a través de la teoría y la práctica feminista, la justicia social y de género.
Reconocimiento "a toda una vida"
Por otra parte, la lideresa Edilia Mendoza Roa recibió el reconocimiento "A toda una vida" por sus luchas por los derechos vulnerados de las comunidades campesinas, negras e indígenas.
También ha trabajado por los de los gremios de pescadores, mineros y artesanos, y su labor se ha concentrado no solo en Colombia, sino en otras partes de América Latina.
Mendoza, oriunda del departamento de Santander, es además la presidenta de la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos Unidad y Reconstrucción (Anuc-ur).
Los derechos agrarios, la defensa de la tierra y el territorio, han sido una de las principales razones de su activismo. Fue una de las voces escuchadas cuando, a comienzos de la década de 1990, se estaba construyendo la normativa agraria, que derivó en la promulgación de una ley que incluyó apartes significativos orientados a las mujeres campesinas.
En la categoría "experiencia o proceso colectivo del año" el ganador fue la Red Somos Génesis, compuesta por más de 160 procesos organizativos y comunitarios rurales de base que agrupa comunidades negras, indígenas, campesinas, mujeres, jóvenes, niños y niñas con asiento en diversas regiones del país.
Su objetivo central es alcanzar verdad, justicia y garantías de no repetición en regiones donde más se ha sufrido la guerra como los departamentos de Antioquia, Cauca, Chocó, Nariño, Putumayo y Valle del Cauca, donde tienen una fuerte presencia.
En el apartado "Nivel ONG", el premio se lo llevó la Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad (LIMPAL-COLOMBIA), organización feminista, pacifista y antimilitarista que trabaja en la construcción de paz en Colombia desde hace 24 años.
EFE